Soy Diego, un fontanero de toda la vida que se ha ido metiendo en reformas porque, oye, todo está conectado. Trabajo en casas y locales, hago las cosas bien y no me gusta marear. Si algo se rompe o si quieres cambiarlo, aquí me tienes.
Desde hace años me dedico a la fontanería, y con el tiempo he ido ampliando a reformas porque me gusta hacer las cosas completas. No vengo a venderte humo: si algo se puede hacer, lo hago. Si no, te lo digo. Trabajo a mi ritmo, pero cumplo.
Desde una fuga pequeña hasta montar toda la instalación de agua de una casa. Me ocupo de que todo funcione bien y no dé problemas.
¿Quieres cambiar el baño entero o solo mejorar lo que ya tienes? Lo diseño contigo, lo instalo y lo dejo como nuevo.
Reformo cocinas pensando en ti, en cómo las usas y en que te dure. Nada de cosas raras: materiales buenos y soluciones prácticas.
Cambio enchufes, arreglo persianas, cuelgo muebles o pinto una pared. Cosas sencillas que marcan la diferencia. Si no puedes hacerlo tú, lo hago yo.
Hablas conmigo desde el minuto uno. Nada de call centers ni intermediarios. Tú y yo, cara a cara, con confianza.
Te digo lo que hay, sin palabras raras ni presupuestos que cambian. Lo que te cuento es lo que es, y eso da tranquilidad.
Si algo sale mal, lo asumo. Si algo falta, lo pongo. No me escondo. Me comprometo hasta que todo esté como debe.